Es uno de los dos caminos reales que unen El Repilado con La Nava, de la que sale por la carretera que lleva hacia Jabugo y, sin cruzar la rivera, continúa por un carril entre un conjunto de casas, Los Chalés, y huertas de melocotones que han dado fama a este pueblo. Prosigue por un carril que sube con una gran pendiente hasta culminar la sierra de la Cadena desde donde se divisan las instalaciones de la mina María Luisa, abandonadas en los años ochenta.

El descenso es por una vaguada, que pasa junto a un antiguo registro de mina, hasta llegar a la vega de Valdegallegos, casi llana en la que, como es general en la Sierra y para mejor aprovechamiento de los pastos, disminuye la densidad de la arboleda respecto a la de las laderas inclinadas. Por un carril paralelo al curso del barranco, llega al punto donde desagua en el río Caliente, en las inmediaciones del Cortijo de Valdelacanal, desde donde por un carril más ancho, llega hasta el cementerio de El Repilado.